sábado, 6 de agosto de 2016

Monumento Dos de Mayo

Plaza Dos de Mayo


En el centro histórico de Lima hay varios lugares con historia y belleza artística pero que sin embargo permanecen en el abandono y olvido. Es el caso de la Plaza Dos de Mayo y su hermoso monumento. Antiguamente fue conocido este espacio como el Ovalo de la Reina, en épocas en que una Muralla rodeaba el actual centro histórico. En este mismo lugar se encontraba una de las puertas de esta muralla, conocida como la Portada del Callao. En 1869 se inicia la demolición de las Murallas de Lima y este ovalo es destinado para la colocación de una columna conmemorativa al combate del 2 de Mayo de 1866, en que cuatro países unidos -Bolivia, Chile, Ecuador y Perú- resistieron y defendieron la plaza del Callao ante la agresión española.

El triunfo en esta jornada bélica ocasionó grandes celebraciones y el fortalecimiento del orgullo patrio. Apenas al día siguiente del combate, el 3 de mayo el gobierno peruano designo el ovalo de la Reina como el lugar donde se iba a emplazar un monumento que recuerde esta jornada. Se hicieron trámites en Europa para realizar un concurso internacional y elegir un monumento a la gloria de nuestros defensores, cuya figura principal había sido don José Gálvez, muerto heroicamente en la batería Torre de la Merced en el Callao.
Unos años después, en 1872 es presentado en los Campos Elíseos de Paris en la Exposición de Bellas Artes la columna al Dos de Mayo. Estuvo en exhibición un tiempo donde los parisinos admiraron la belleza y calidad artística de esta obra ejecutada por el escultor León Cugnot y el arquitecto Edmon Guillaume. Finalmente -con un modificación: se había cambiado la escultura superior por una más pequeña, la original sería llevada a Chile durante la ocupación al encontrarla en un depósito en el Callao- fue traída al Perú y colocada en este antiguo ovalo que paso a llamarse desde entonces Plaza Dos de Mayo. La inauguración se llevó a cabo en julio de 1874.

Con el paso de los años este lugar se convirtió en escenario de romerías y fiestas patrióticas que recordaban este suceso y a los caídos en defensa del Callao. En 1924 el lugar es hermoseado con la construcción de ocho edificios de estilo Segundo Imperio, de fuerte influencia afrancesada. Desde entonces el lugar se convirtió en el orgullo de los limeños y era considerada con justicia una de las plazas más hermosas de América.

Lamentablemente con el paso del tiempo hasta la actualidad, el descuido y abandono se ha hecho presente en este hermoso espacio urbano monumental de nuestra ciudad. Uno de los edificios se incendió a fines del año 2014, los demás lucen tugurizados y en abandono, con conexiones clandestinas y la informalidad e inseguridad campea en sus alrededores. Sumado a esto el monumento no luce como en sus mejores épocas. La destrucción de algunas piezas de bronce y mármol de la columna y el robo de ornamentos de su hermosa reja hoy es su presente.